Relato de una jornada

Relato de una jornada

desembarqué en un muelle de almas esclavizadas
al fondo un mar de murmullos encadenados
y un cielo nublado de insultos provocadores
caminé por una vereda de vida que acompañaba
a una calle asfaltada
en cada esquina habia semaforos
y las avenidas estaban adornadas con negocios
me perdí en el cruze de una flor
y agarré el camino que lleva al pueblo
¡iforastero! Me gritaron diarios y revistas
humanos y no tanto
¡ilegal! fué el veredicto de una balanza media cara
¡pecador! me gritaron sombras con espasmo
hice un boquete con sueños a la prision de las mentiras
y me fugué de las garras de las rutinas junto al poder del viento
la corriente del rio sin querer nos llevó
hacia las tierras doradas de mi adicción que me consuela