lunes, 29 de marzo de 2010

¿De que hablamos, cuando hablamos de compromiso?
Breve critica al método de exaltar la remera.
Proponiendo la revolución singular.



Cuando veo a tantos gritando y marchando no puedo dejar de repetirme y obligarme a inyectar en mis venas un lema con lo que sentencio a toda hipocrecia maquillada de militancia: la memoria es mucho mas que una bandera y la verdadera conciencia es mucho mas que una remera. Por mas que genere intolerancia en este hermoso momento de agite politico por el que afortunadamente transita parte de este pais, siento la sincera necesidad de bañar con interrogantes a los que van a una marcha y porque sienten una hora de euforia, se obligan a las lagrimas y exaltan todo cantico zurdo, creen (porque realmente creen) que asi lavan sus culpas de ciudadano y no hacen mas que dar el empujon fundamental para condenar a la verdad a un eterno descarte de responsabilidades.

Soy claro: es importante la presencia ante que el olvido, es fundamental que se incline la gente a la union, pero si es momentanea es un envase vacio de enseñanza para el futuro.

Necesitamos inventar el metodo y no repetir antiguos, porque es hora, ahora o nunca, de abandonar la tendencia a asegurarnos el paraiso del compromiso tan solo porque brindamos nuestra presencia. ¿Y mañana? ¿Donde queda toda esa energia supuestamente militante y conciente-social?, ¿a que se la destinamos?, ¿que construimos realmente?, ¿en que innovamos?, ¿que estamos aportando al devenir?.

Desplazemos un rato al gobierno actual y a toda la basura politica de la oposicion, para eso estan las discusiones que por suerte estan abundando en las radios y en canal 7. Miremosnos a nosotros mismos y decidamos de una vez vomitar todo nuestro silencio voluntario, toda la ignorancia obligatoria, aceptemos que si la cultura nacional esta contaminada nosotros fuimos los fabricantes y que la única manera de desintoxicar a tan anciano basural es con el aporte singular y nada mas.

Enfrentando al espejo de nuestras reflexiones y sintiendonos satisfechos, que las voces de nuestras conciencias dialoguen y no discutan, primero revolucionarnos nosotros mismos ante que pretender una gran revolución social. Sino naturalmente se caera en una secuencia repetitiva y en un caos matemático de constantes contradicciones, ¿Se puede proponer , apoyar y levantar bandera de que queremos el cambio cuando no cambiamos nosotros, cuando nuestro interior apesta, cuando nuestra mente, nuestro cuerpo y nuestros sueños reales no estan revolucionados?.

Seamos sinceros aunque duela, la verdadera memoria no necesita ni depende de banderas ni de bombos, si no que la verdadera y autentica memoria es aquella que vive eternamente purificada por la coherencia entre el dicho y el hecho.

Porque si existiera esta conexión entre el decir y el que hacer, la conciencia y el cambio llegarian inevitablemente, ya no seria una moda del momento, sino una consecuencia total del reflejo concreto de nuestras ideas.

Desgraciadamente me dolió comprobar esta “tesis extremista ” en la reciente marcha del 24 de Marzo, cuando mas de la mitad de los presentes se enorgullecia de condenar a la memoria a ser una remera y no como lo que tendria que ser: sangre que hace enfurecer y retorcijar nuestras venas.

“Yo me pongo la camiseta ”… que dolorosa manera de incomodar y y subestimar a los ideales de tantos santos desaparecidos, que absurda e inocente manera de burlarse de sus sueños, lo que me produciría espanto seria saber que esa soberbia fue conciente.

De a poco se ve llegar una luz, infima, lejana, que llega con precaución y con el miedo de volver a ser torturada como lo fue en su momento. Esta en nuestras manos atraerla y no hacerla huir. Trabajemos VOLUNTARIAMENTE para convencerla de asentarse en las raíces de un nuevo pais, si es que realmente queremos un nuevo pais, sino fantasias, todo habrá sido nuevamente, UNA TRISTE FANTASIA...

Camilo Blajaquis

18 comentarios:

Maby dijo...

Bien César. Coincido con tu pensamiento. A veces crep que tenés razón, que naciste en 1921, aunque la vejez no necesariamente y no siempre es sinónimo de sabiduría. Me gustaría saber como va tu vida. Ya sabés que contás conmigo.
PD: recién hice un enlace de tu posteo a mi blog Comando Megafon
Un abrazo Maby

María Florencia Alcaraz dijo...

Me dejaste pensando. A veces coincido totalmente con vos, otras la gente me sorprende y puedo superar el prejuicio. Muchos de los que fuimos tenemos una militancia que va más allá de ir a figurar a cuánta marhca se hace. Y muchos otros muy bien los describiste vos.
Lo cierto es que si bien el último 24 hubo cosas para el olvido, trato de rescatar lo positivo para seguir adelante.
Así que optimismo amigo. En fin, me parece interesantísima tu mirada y la lectura que hacés. Después "en persona" hablamos bien, porque ya tengo sueño para seguir escribiendo.
Te quiero!

jjazz dijo...

leo y pienso, siento lo mismo, yo digo que el día que estalle la revolución (permítase la utopía), quiero actuar igual al anterior. la única y verdadera rebelión esta en cada ser, y tiene que ser hasta la muerte. esto es lo realmente difícil, tanto como darse cuenta que somos hasta que no somos más.

Unknown dijo...

Bien ahi pibe!

la mafia del cajón dijo...

cesar amigo genio: espero que te halla gustado el grupo la mafia del cajón. Podríamos usar uno de tu escrito para agregarle música?
porque sos la voz de la juventud "inexperta"(ja,ja,ja)... que nos dejo voquiabiertos por tener la posta de lo que pasa y como nos pasa. Capo segui componiendo.

Anónimo dijo...

Camilo Blajaquies,... llegue a tu blog por intermedio de Quique Pessoa, Pessoa como aquel otro Fernando Pessoa, me agrado mucho leer tus cosas, me provoca cosas todo eso urbano, tus experiencias el aire de revolucion de esperanza. Tambien hago mis travezuras por aca en labiatta.blogspot, pero eso no es lo q importa, entre otras, estoy a punto de recomenzar la radio, seras uno de mis apuntalamientos lo se. Te dejo un gran abrazo y felicitaciones por este tu espacio, vivo em pcia de bs as, muy lejos de alli, unos 500 km.
Un abrazo.
Geronimo Delgadin.

Anónimo dijo...

Me resulta muy interesante leer tus comentarios y creaciones. Llegué hasta acá después de escuchar la nota que te hicieron en la radio. Me gustaría poder entrar en contacto para enriquecerme de algunos puntos de vista tuyos y poner en cuestión algunos otros. Si querés agregame al msn gringosdb@hotmail.com
Un abrazo

Micaela Bastidas dijo...

Aquellos que estamos revolucionados por dentro como decis, tampoco sabemos que hacer, como empezar. Es un camino difícil, la solución es educar, concientizar, pero para educar hay que tener el poder y modificar el sistema educativo. Para tener el poder, hay que ganar la masa, para ganar la masa en América latina (paternalista, personalista y populista) tiene que haber un líder carismático que seduzca y lo voten (legitimándolo) entonces ahí es cuando se educa, eso les daría la conciencia de luchar por la igualdad, la libertad y teniendo la herramienta (educación) para hacerlo. También primero hay que alimentar, con hambre no se puede pensar, eso también se cambia desde el poder. Opino desde mi ignorancia, no se cual es el camino, pero lo que quiero que entiendas es que los que queremos hacer no sabemos que? Como?

Mariano... dijo...

Como estas camilo... que placer y que hermosa cachetada que me das con tus palabras... era necesario para mi volverte a leer, gracias por estar y seguir simpre y a cada momento dando diagnosticos de esperanza... un abrazo y un suspiro de alegria la distancia...

Lamaga dijo...

Muchos sueños encontrados, la verdad de loleido esmas real que lo vivido?

por un centro cultural en cada villa.

mucha suerte mirando adelante, sabiendo que lo que ayer fue te convierte en lo que sos hoy.

Un abrazo con agua de mar
Daniela

Anónimo dijo...

Hola César, te escuché recién en la radio y también cuando saliste por tel hace un tiempo. La verdad es que tu claridad de pensamiento emociona e incita a involucrarse activamente para reconstruír esta sociedad casi devastada desde un lugar nuevo y superador. Un fuerte abrazo y nunca te dejes vencer.
Jorge.

jime dijo...

yo tambien puse un enlace de tu blog en mi blog!! segui asi!!

Anónimo dijo...

en Rosario, de donde soy, la marcha del ultimo 24 de marzo fué significativa, pues eramos 30000,mas q significativa.
y pasamos por los TRIBUNALES FEDERALES donde por esos días se desarrollava el juicio a 5 genocidas.Que dias despues fueron condenados a PRISION PERPETUA, SI justo ese día el sapatra de DUHALDE y otros hablaban de punto final a los juicios y hacian apologia de la impunidad,¡ahí está la diferencia: nosotros, el pueblo en la calle pidiendo JUICIO Y CASTIGO!!. 1 ABRAZO marcelostampone@hotmail.com

Gonzalo Blanco dijo...

Hola Camilo. Muchas gracias por regalarnos este espacio. Llegué a aquí por una nota que te hicieron en canal 7 o encuentro, no recuerdo. Lo cierto es que de a poco voy leyendo tus publicaciones y es realmente cautivante.
Quizá me decidí a comentar en este escrito porque estoy convencido que la revolución es una y comienza por cada uno. Pero disiento con vos en el tema de la remera... Creo que tal como las revoluciones de los pueblos se verán tarde o temprano porque son procesos, también las revoluciones internas lo son. Hay quienes se compran la remera y no están realmente conmovidos o no son totalmente consecuentes con las consignas de justicia y memoria. Quizá lo hacen porque les da un cierto sentido de pertenencia o porque no conocen otras formas de manifestar eso que tienen dentro, y en ambos casos creo que no dejan de estar en un proceso interno revolucionario.
En mi caso hace relativamente poco que puedo poner en hechos mi forma de pensar. A mí me enseñaron el "no te metas", y de muy chiquito el "no hables de política".
Yo a mis hijos les voy a decir: "metete", "expresá tus convicciones", pero fue un proceso largo el mío también. Tuve que luchar con mi cuna. Con mis viejos. Y comencé sólo "poniéndome la camiseta". Fue como decirme a mí mismo que por ahí iba la cosa. Ir tomando impulso para hoy estar laburando activamente desde donde creo que puedo ayudar al proceso general de revolución. La revolución del Amor en la que desde distintos lugares, caminamos juntos.
Amigo y hermano, vuelvo a agradecerte por esto que nos regalás. Te voy a difundir, y no te enojes, voy a utilizar en mis espacios de lucha tus escritos.

Un abrazo Grande

Gonzalo.

Amalia Gieschen dijo...

Gracias Camilo.

Anónimo dijo...

Coincido plenamente con lo que planteás, tenés una gran claridad de pensamiento y expresiva. saludos!
Ana

Anónimo dijo...

Querido amigo me llegó esta publicación y por la honestidad que nos une me veo interesado en responder algo muy puntual. Hacer una campaña para que muchas personas se pongan una camiseta es tan solo una herramienta. Yo creo que en este caso ha permitido acercar a mucha gente, sobre todo pibes y pibas a tener condena social por los crímenes del genocidio. Esto aporta y mucho a blindar de legitimidad el proceso de juicio y castigo que se da mas en el ámbito de los tribunales. Donde se cocina la impunidad. Si no contáramos con esa legitimidad social, que en última instancia se da en la expresión mas básica del pueblo como puede ser ponerse una remera con una frase, sin esa expresión que en el fondo se hace colectiva el 24 de marzo, seguramente tendríamos muchos menos de los 250 genocidas condenados y muchos mas de los 40 prófugos que hoy en día se burlan de la humanidad en algún lugar de la humanidad. En cuanto a quién se le puede ocurrir sacar una campaña pública de este estilo, nos conocemos querido Camilo y deberías saber que fue una organización política que hace 16 años da la pelea todos los días y no solo un 24 de marzo. Construir sentidos desde algo tan básico como ponerse una camiseta puede lograr cosas increíble. Puedo dar fe. En los 90 se escrachó a Astiz con una remera que decía "cárcel al torturador". Hay una foto muy conocida. El mes que viene Astiz va a ser condenado a prisión perpetua por los jueces de la nación. Mucho tiene que ver aquella remera con lo que va a suceder. En todo caso podemos debatir sobre el debido uso de una herramienta de lucha o sobre si una herramienta está agotada en este tiempo. Quizá hasta podamos ponernos de acuerdo en cuanto a la práctica de las campañas de frases en las remeras. Lo que no podemos es negar todo lo que sucede al rededor de ese acto tan humano que significa vestirse para salir en sociedad. Espero poder abrazarte pronto. Agustin Cetrángolo

patoch dijo...

Dos años después leo este texto magnífico!!!, ( aún vigente para mi).
Que placer leer no sólo tu poesía sino tus reflexiones, creo que sumadas a la tarea diaria conforman aproximaciones al hombre nuevo, a ese que intentamos construir desde hace décadas, con tantas idas y vueltas...
Me gustaría conocerte, conocerlos.
Un abrazo.Patricia